ALEJANDRO PRIETO HURTADO



SIGUIÉNDOLE EL PASO A LOS SUEÑOS

“Para conseguir grandes cosas debemos no sólo actuar, sino también soñar; no sólo planear, sino también creer”  Anatole France (escritor y líder francés.   Premio Nobel de Literatura en 1921)


El empresario y orador motivacional estadounidense Jim Rohn dijo alguna vez que “la disciplina es el puente entre metas y logros”. Y eso es clarísimo: por más metas y sueños que planeemos alcanzar en la vida, sin trabajo duro y constante difícilmente éstos se harán realidad.  Porque, aunque digamos con Charles Henry Parkhurst (clérigo y reformador social norteamericano) que “el propósito es el que da significado a nuestras vidas”, es obvio que “un propósito sin plan es sólo un deseo”, como lo asevera el también estadounidense Larry Elder, escritor y productor de radio. 

Así pues, para alcanzar nuestras metas y realizar los más grandes sueños se requiere de una planeación paso a paso y -sobre todo- de mucha disciplina.

Muchos son los estudiantes que en Incolballet van mostrando esa convicción de seguir sus sueños y que van marcando el camino con pasos fuertes y firmes. Jovencitos que parecen estar conscientes de que, como dice la sabiduría hindú, “cada uno está puesto en el mundo para convertirse en un individuo independiente y autónomo”, porque -como dice el francés Jack Lang, Ministro de Cultura en la presidencia de François Mitterrand: “la autonomía es un requisito para la eficacia”.

En el Cary Ballet Conservatory, en Raleigh (C. del N.)
Y así lo demuestra el jovencito Alejandro Prieto, quien -con apenas 13 años- dejó su colegio, sus amigos, su familia, para irse en busca de sus sueños a un país desconocido para él. Se ganó una Beca para el Cary Ballet Conservatory, en Raleigh-Carolina del Norte (USA).




El profesor de Sociales, César Vinueza, manifiesta que “en Alejandro siempre ha prevalecido el amor por el Ballet, por su carrera, lo que él visualiza como su futuro. Al irse a Estados Unidos se está abriendo paso hacia esa meta, porque sabe qué es lo que quiere y lucha por ello”.  David Berrío, compañero de curso en el colegio, dice que “Prieto siempre está acercándose a lo que quiere, a lo que le gusta, y alejándose de lo que no, incluidas las personas. Es un pelado muy divertido cuando está en confianza con la gente”.

Con sus compañeros de IV de Ballet  (2016)
“Cuando Alejandro se propone algo hace lo que sea para lograrlo”, asegura su ex compañera de V de Ballet, Luisa Cabarcos. “Siempre persigue sus sueños. Me encanta que le esté yendo muy bien en Estados Unidos, donde ha podido mostrar todo su talento. Él es un gran bailarín y una increíble persona.  Lo quiero mucho. Siempre me hace muy feliz con sus apuntes chistosos cuando chateamos. Me anima a hacer cosas”.

¿A dónde te fuiste, Alejandro?
Me fui a Raleigh, capital del Estado de Carolina del Norte. Al Cary Ballet Conservatory. Primero me dieron una beca de verano. Después me probaron para ver si merecía la beca completa, la de un año, y me la gané también. Ya casi cumplo un año. Primero me fui en junio, volví y regresé en septiembre de 2016.


¿Qué es el Cary Ballet Conservatory?
Es una Escuela-Compañía. La mayoría de sus integrantes son personas de la misma ciudad, pero hay muchos extranjeros de varios países: venezolanos, colombianos, como en mi caso, etc.


¿Ir de Incolballet te dio alguna ventaja?
Claro. Las bases de ballet me las dio Incolballet. Allá he ido aprendiendo otras cosas.

¿Te sientes fuerte allá?
Pues uno empieza sintièndose en desventaja, porque el nivel que se maneja en el Cary Ballet es muy avanzado. Sin embargo, el esfuerzo que yo haga es lo que me permitirá alcanzar un gran nivel.

Con la profesora de Ballet, Carolina Aponte,
(egresada de Incolballet)
¿Y cómo te sientes, en general?
Es muy difícil irse solo para un país al que nunca habías ido, estar solo. Empezar de cero en todo, comenzar a crear nuevas relaciones. Ahí empieza uno a extrañar a sus compañeros del colegio, a sus profesores, los amigos, la familia…

Con Laura Álvarez
¿Ser una persona autónoma te ha ayudado?
Sí, yo creo que tener siempre la constancia. Ser consciente de que mis papás no están ahí conmigo para decirme lo que tengo que hacer. Es el momento de poner en práctica lo que ellos me han enseñado: los valores, la exigencia conmigo mismo.

Con Luisa Cabarcos, Brandon Leudo,
Angélica Herrera, Laura Álvarez,
David Berrío y la profe Carolina Aponte
¿De qué te sientes orgulloso en este momento?
Bueno, yo creo que principalmente por el hecho de haber podido ir becado a Estados Unidos. Sí pensaba que algún día lo haría, pero no imaginé que así de pronto me sucedería.  Digamos que me llegó sin proponérmelo. Mi mamá empezó a gestionar para que yo audicionara, pero yo desconfiaba de mí mismo. No creí que tuviera un buen nivel para ganarme una beca como ésta.

¿Sigues becado?

¿Hasta cuándo?
Hasta que me digan que ya no más.

¿Cómo te proyectas?
Quiero ser un bailarín de alto nivel en una gran Compañía. Por eso me propongo ser mejor persona cada día y  muy profesional en cada cosa que hago.

Con sus ex compañeros
de VI de Ballet (2017)
¿Qué estás haciendo por estos días en el colegio?
Estoy por estos días de vacaciones en Cali, pero me vuelvo a Carolina del Norte en septiembre. Estoy tomando clases de ballet con mis profesores… Eso me hace sentir bien, porque me hacen falta.

Con Juan Esteban Sánchez, Brandon Leudo,
Daniel Esteban Sánchez, Juan Camilo Rodríguez
y el profesor de música, Álex Marlon.
¿Qué les dices a los estudiantes de Incolballet?
Que sean disciplinados y constantes si quieren lograr todo lo que se propongan.  Que no paren. Hoy en día hay mucha competencia y necesitamos mucha constancia para estar ahí. Que aprovechen la paciencia de los profesores. Aquí te explican y te vuelven a explicar hasta que entiendas. En la Academia donde estoy en Estados Unidos te explican una vez y como que… si no entendés, mal por vos, no aprovechaste y verás qué hacés.

MUCHAS GRACIAS A ALEJANDRO PRIETO POR SU TIEMPO PARA ESTA NOTA. Y LE DESEAMOS LO MEJOR EN SU CAMINO.



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